Baloncesto es un término que nos define, a todos aquellos jugadores y jugadoras que lo
practican. Es más que un deporte, muchos dicen que es un estilo de vida. Cuando
era pequeño algo me atraía a las pistas, me entraron ganas y decidí apuntarme.
Como todo, al principio cuesta, pero os digo que el esfuerzo a merecido mucho
la pena. Desde entonces, llevo una vida rodeada de baloncesto. La verdad, no
todo son alegrías, también tienes momentos de tristeza, de rabia, cuando
podrías haber evitado la derrota, pero en eso consiste un deporte, en ganar, y
también, en saber perder.
Gracias al baloncesto, yo y muchos más hemos obtenido nuevos
amigos, amistades, reconocimientos, buenos momentos, y por ello, nos dudamos ni
un segundo en decir que el baloncesto es nuestra vida. Practicamos un deporte,
minusvalorado como muchos otros en nuestro país, y no debería de ser así, pero
nuestros medios de comunicación nos tienen acostumbrados a mostrarnos la parte más triste, pésima y negra del
deporte, los fraudes, el sucio dinero, y las inversiones, y no el verdadero
esfuerzo del camino al éxito, la disciplina o el trabajo diario, entre otros.
Son muchas las tardes que te olvidas de tus problemas cuando
te vas a entrenar, y cuando terminas eres otro. En mi caso, ¿cuántas y cuántas
veces habré pensado de qué sería yo sin el baloncesto? ¿No os pasa que jugando
os sentís especiales, únicos?
Yo creo que sí, y ahí está la grandeza de todo esto. El
baloncesto les sonríe a todos sus amantes por igual, porque todos tenemos la
oportunidad de aprenderlo. Los que no han jugado a baloncesto se pierden la
alegría que siente uno al meter un triple, al meter la primera canasta en un
partido, o al dar una asistencia. Se pierden la confianza del grupo, esas cenas
de equipo, y esas duchas después de una victoria. Entonces, si todo es
positivo, ¿por qué sigue el baloncesto sin fomentarse como se debería? ¿Por qué
no le dedican ni 3 minutos contados de reloj en las noticias? Somos nosotros
los que tenemos que hacer esto grande, somos nosotros los que tenemos que decir
con la boca bien grande que jugamos al baloncesto y no al fútbol. En nuestras
manos está que cambien las cosas. ¿Por qué no lo enfocamos de una manera
diferente? ¿Por qué no invitamos a nuestros amigos a que vengan a vernos entrenar,
a ver un partido y vean cómo funciona todo?¿Por qué no nos ponemos de acuerdo
para crear hashtag común sobre el baloncesto?
Todo, todo nosotros lo podemos cambiar, sólo hay que poner un
poco más de esfuerzo, y conseguiremos que día a día, nuestra familia, la
familia de adictos al baloncesto crezca, y cada vez seamos más ¡Únete y
disfruta con el baloncesto!
@zonadetiro
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